El Estado Mexicano dio en Oaxaca una disculpa pública al defensor de pueblos indígenas y derechos humanos en la región Mixe y Zapoteca de la Sierra Norte, Damián Gallardo Martínez, señalado de dirigir el comando que secuestró a los niños Juan José y Alexa Álvarez Benfield.
Del mismo modo, el maestro fue acusado de ser un comandante del Ejército Popular Revolucionario (EPR) y señalado de dirigir el comando que secuestró a los menores, sobrinos del entonces presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani, ocurrido el 13 de enero de 2013. Los responsables asesinaron de un balazo al chofer de la camioneta en que viajaban y la cual volcó en un pequeño barranco.
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De acuerdo con la acusación, el comando estaba integrado por los también maestros Mario Olivera Osorio, Lauro Atilano Grijalva y Sara Altamirano Ríos, los cuales ya fueron liberados.
A través del subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez, en un acto público en la ciudad de Oaxaca, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador reconoció la responsabilidad internacional del Estado Mexicano en el caso del maestro Damián Gallardo Martínez.
El profesor, dijo, fue criminalizado, estigmatizado y exhibido a los medios de comunicación sin respetar sus derechos humanos y su presunción dé inocencia, ni garantizando su derecho a una defensa adecuada.
Asimismo, Encinas Rodríguez formó parte de una cultura de criminalización de la protesta social y al magisterio oaxaqueño ante la resistencia a la reforma educativa del gobierno anterior.
"Nos encontramos reunidos para verificar la honra y trayectoria del profesor, de su familia y la comunidad, reivindicando su lucha como defensor de los derechos humanos. En representación del Estado Mexicano, reconozco que agentes públicos incumplieron sus funciones y provocaron que Damian fuera objeto de violaciones graves a sus derechos humanos, por lo que ofrecemos una disculpa honesta, sincera y con convicción por las afectaciones e impactos que esas acciones del Estado Mexicano tuvieron en su vida, en su familia y en su comunidad", subrayó.
"Ofrezco una disculpa pública por los agravios, maltratos crueles y degradantes de los que fue objeto por la falta de acceso a la justicia y por el daño causado a su familia y a su comunidad", finalizó Encinas.
Damián es maestro y fue miembro de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) en 2006, que causó una revuelta social contra el entonces gobernador Ulises Ruíz, iniciada por la represión a un plantón magisterial. Además, ha participado en campañas por la reforma educativa en México
El 9 enero de 2019, Damián Gallardo Martínez fue liberado después de 5 años y 7 meses en prisión, luego de que el 28 de diciembre de 2018, junto al también defensor de derechos humanos Enrique Guerrero Aviña, recibieran el beneficio de libertad
El 4 febrero de 2016, el defensor fue sometido a tortura y maltrato, tras su detención arbitraria el 18 de mayo de 2013, durante una redada de la Policía Federal y que no mostró alguna orden de aprehensión. El defensor fue posteriormente incomunicado durante 30 horas, hasta que firmó confesiones de autoculpabilidad, involucrando a integrantes de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE). Damián y sus colegas luego fueron acusados de pertenecer al crimen organizado y secuestro de menores.
Los abusos en prisión fueron en represalia a un recurso de amparo presentado contra el director del Centro Federal de Readaptación Social Número 2 de "El Salto", Jalisco, donde se encontraba encarcelado.
El 26 de mayo de 2014 fue víctima de un ataque grave perpetrado por otro detenido en el área de recreación en el Cefereso.
El detenido denunció que en la cárcel los guardias le bajaban los pantalones y ropa interior hasta las rodillas, y lo obligaban a hacer sentadillas mientras les insultaban. También los vigilantes de la prisión lo amenazaban con trasladarlo a otro penal, lo que complicaría considerablemente el seguimiento jurídico de su caso.
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Esto mereció la atención internacional, al grado de ser una de las promesas hechas por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En noviembre de 2014, el grupo de trabajo de las Naciones Unidas sobre Detención Arbitraria emitió una opinión clasificando la detención de Damián Gallardo Martinez como arbitraria, y exigió su liberación inmediata e incondicional.
