"Estamos arrepentidos, pedimos una disculpa pública, nunca pensamos que esto llegaría tan lejos”, dijeron Jesús "N" y Laura “N”, la pareja detenido por haber amenazado y golpeado a una maestra y la cocinera del kínder "Frida Kahlo", después de que la jueza de control del penal de Cuautitlán les dictó prisión preventiva por el delito de extorsión, además que existe otra carpeta de investigación por presunta tentativa de feminicidio.
Durante la audiencia que se celebró este viernes en los juzgados penales de Cuautitlán y que duró casi tres horas, la jueza informó que durante la próxima audiencia, a realizarse el próximo martes, se determinará si son vinculados a proceso o les da la libertad.
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Además, se determinó que el hijo menor de la pareja quedará bajo la custodia del DIF, pues el Ministerio Público demostró que su núcleo familiar no es el adecuado, ya que son violentos y agresivos.
La jueza explicó que decidió la prisión preventiva para los esposos porque representan un peligro para la integridad física de la profesora y la cocinera, además de que podían darse a la fuga.
La profesora y la trabajadora del kinder coincidieron en sus declaraciones que la pareja las golpeó y en repetidas ocasiones amenazaron con matarlas a ellas y a sus familia si se volvían a meter con su hijo.
Por si no fuera suficiente, durante la agresión las obligaron a hincarse, las encañonaron con un arma de fuego y exigieron que le pidieron perdón a su hijo, lo cual hicieron por el temor a ser asesinadas.
Al término de la audiencia, Jesús "N" y Laura “N” dijeron que estaban arrepentidos y que actuaron de esa manera porque les dio coraje ver que su hijo estaba lastimado de un brazo y que les haya dicho que su maestra se lo provocó porque lo trataba mal; eso los llenó de desesperación y coraje, pretendieron hablar con la directora y como no les hizo caso ni los atendió, decidieron actuar por su cuenta y darle una lección a la profesora para que no se volviera a meter con su hijo.
Mientras es resuelta su situación jurídica, Laura permanecerá en el penal de Barrientos y Jesús en el Centro de Readaptación de Cuautitlán.
Nota publicada en La Prensa