Desmembrado y dentro de dos maletas fue hallado el cuerpo de un salvadoreño que por meses esperó junto con su familia una respuesta a su solicitud de asilo en Estados Unidos, desde la ciudad fronteriza de Tijuana, dijeron el viernes autoridades.

El hombre de 35 años vivió en esa ciudad durante seis meses, a donde fue enviado por el gobierno estadounidense bajo el esquema de Protocolo de Protección a Migrantes (MPP por sus siglas en inglés).

Pero el 20 de noviembre fue encontrado muerto, abonando a las críticas de activistas que afirman que este y otros programas firmados entre Estados Unidos y países expulsores de migrantes ponen en riesgo la vida de miles de personas.

El fiscal regional de Baja California, Jorge Álvarez, aseguró que los asesinatos de migrantes no son recurrentes, incluso afirmó que los cuatro o cinco casos registrados en el último año tuvieron que ver, en su mayoría, con un entorno de su vida en Tijuana.

En este caso, dijo, no está claro el móvil, aunque reconoció que homicidios con estas características suelen estar vinculados a la venta de droga al menudeo.