Puebla.- El uso de cañones antigranizo en la zona de Cuautlancingo, por parte de Volkswagen de México, ha generado polémica, debido a que los ejidatarios afirman que este sistema inhibe la lluvia en la zona, lo que afecta la producción en los campos de cultivo. En tanto, la armadora refiere que las ondas sonoras no provocan ningún daño ni alteración del clima.
Los cañones comúnmente son utilizados para proteger contra lluvia, granizo y heladas a los campos de cultivo, sin embargo, Volkswagen usa este sistema para proteger los autos nuevos que produce y resguarda a cielo abierto.
Productores señalan que los cañones ahuyentan la lluvia en la zona y afectan a alrededor de 180 hectáreas de cultivo temporal de más de 300 ejidatarios y pequeños agricultores, por lo que exigen el cese de esta tecnología.
La empresa, por su parte, responde que el objetivo es reducir el tamaño del granizo para que éste provoque el menor daño posible al contacto con la superficie.
Sobre el tema, el representante de la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial, Rodrigo Riestra, aseveró que hay un dictamen de la Conagua que determinó que el uso de este tipo de cañones no perjudica los cultivos, sin embargo, han ordenado a Volkswagen cancelar el empleo de estas ondas sonoras.
PÉRDIDAS MILLONARIAS PARA VW
A pesar de que el gobierno de Puebla solicitó a Volkswagen suspender el uso de los dispositivos sónicos antigranizo, el vicepresidente de Relaciones Corporativas de la marca alemana, Carlos Luna, dejó entrever que seguirá utilizando la tecnología, pues aseguró que no afecta de alguna manera al medio ambiente y que cuenta con los permisos para su utilización.
Las pérdidas en 2017 para la empresa ascendieron a 20 millones de dólares, debido a la caída de granizo sobre los autos terminados.
SI PUEDEN DAÑAR CULTIVOS
Los cañones antigranizo usados por la empresa generan una onda de presión en la atmósfera que dispersa las nubes; sin embargo, sí puede generar problemas en la agricultura, sobre todo si son mal utilizados, así lo informó el catedrático investigador de la Facultad de Agronomía de la UPAEP José Juan Zamorano Mendoza.
Los artefactos han sido usados en otros países del mundo para evitar que el granizo dañe cosechas como uvas o berries y son los productores quienes las implementan bajo ciertos criterios.
No obstante, el académico explicó que en Puebla se suscitan alrededor de 4.3 eventos de caída de granizo por año y los cañones deben utilizarse cuando la temperatura de la atmósfera es de cero a menos grados Celsius, es decir, cuando inicia la formación de nubes con partículas pequeñas de agua.