Desde hace un mes, la Casa del Migrante enfrenta un sobrecupo que ha obligado a cerrar sus puertas en más de una ocasión.
El flujo de migrantes por San Luis Potosí no se ha detenido, inclusive hay noches en que más de 500 personas han tocado la puerta de la Casa del Migrante para resguardarse de las condiciones del clima y la inseguridad de las calles.
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Debido a ello, hace un mes se colocó un letrero de "Casa cerrada", mismo que ya luce otra vez en la puerta del albergue católico.
En este semana, más de 580 personas han buscado resguardo en la Casa, misma que tiene capacidad para 160 personas en las habitaciones, por lo que nuevamente han tenido que instalarse colchones en los pasillos y la cancha.
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Sin embargo tampoco los colchones han sido suficientes, por lo que se colocaron bancas para evitar en lo posible, que las personas duerman sobre el piso, pero aún así hay quienes han tenido que pasar la noche sobre cartones para tratar de aislar el frío del piso.
Y es que a pesar de ver rebasada su capacidad, se procura recibir a los más posibles para evitar que pasen la noche totalmente a la intemperie, con los riesgos que esto conlleva.
La administración del albergue hizo un llamado a la población para donar en la medida de sus posibilidades, cobijas, colchonetas u otros artículos que ayuden a que los migrantes pasen las noches en mejores condiciones, sobre todo ahora que ha comenzado a descender la temperatura.
Publicada originalmente en El Sol de San Luis