La cuarta caravana de migrantes logró evadir este jueves un operativo montado por más de 500 elementos del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Guardia Nacional (GN) para cortar su camino hacia Mapastepec.
Este nuevo contingente salió durante la madruga de la ciudad de Huixtla, donde habían parado a descansar, y logró pasar sin problemas la aduana de Cerro Gordo, donde se encuentra una caseta migratoria.
No obstante, al llegar al ejido de San Felipe Tizapa, municipio de Escuintla, los interceptó el personal migratorio y de la GN, que decenas de migrantes trataron de evitar huyendo hacia los sembradíos de mango y palma de aceite.
Hasta el momento ha trascendido que el operativo sólo consiguió detener a 25 personas de varias nacionalidades. Por otro lado, parece haber varios lesionados, que supuestamente se habrían lastimado en su intento de huir por el monte; sin embargo, algunos migrantes acusan agresiones por parte de los agentes.
Las autoridades mexicanas continúan en el lugar, posiblemente a la espera de que los integrantes de la caravana aparezcan de nuevo en la carretera para de nueva cuenta intentar detenerlos.