SAN LUIS POTOSÍ. La reposición de la investigación por la muerte de Karla Pontigo, ordenada por la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, será complicada porque hay protocolos que ya no se pueden reponer, pero dará oportunidad para exponer pruebas que se desecharon o no fueron valoradas correctamente se vuelvan a ofrecer.
El presidente de la Asociación de Abogados especialistas en Oralidad y Ayuda a la Sociedad, Efraín Torres Salazar, dijo que se regresa a cero la investigación del caso para indagarlo como feminicidio y no como accidente.
"Se concede el amparo para ciertos efectos, solo para ciertas cosas para judicializar la investigación y para que se ejercite acción penal", explicó.
Torres Salazar señaló que lamentablemente, a siete años de los sucesos hay protocolos que ya no se pueden reponer, como la reconstrucción de hechos, "porque ya no hay ni lugares ni las formas", ni se puede verificar que las huellas hayan sido tomadas con la limpieza que se requería, por ejemplo.
Otros protocolos que ya no se pueden reponer son los que se deben tomar al momento, como el proteger todas las evidencias y pruebas de la contaminación. "La investigación estará enfocada entonces a testimonios, a valorar nuevos videos, nuevas actuaciones, y a reponer actuaciones que se hayan quedado a medias o imprecisas", detalló.
En el caso de los probables testigos, también hay complicaciones, porque no se sabe si todavía están disponibles, es decir, si cambiaron de domicilio o si ya fallecieron.
Torres Salazar, lamentó que la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el caso Pontigo, haya dejado ver que la entonces Procuraduría, hoy Fiscalía General del Estado, no haya realizado un trabajo perfecto. "Amañado o no amañado, lo hicieron mal", aseveró.
