Con tres grupos detectados como agresores, 93 agresiones y el asesinato de un periodista, es como la Comisión Estatal para la Atención y Protección de Periodistas (Ceapp) cerró estadísticas en 2021, indicó Israel Hernández Sosa, secretario ejecutivo de la Ceapp.
Comentó que la delincuencia organizada ocupa un porcentaje alto dentro de los grupos detectados como agresores a periodistas, pero también corporaciones policiacas, “en este último punto se tiene que trabajar porque son los policías que deben garantizar la seguridad del periodista y no ser su agresores”.
Aun cuando el índice de asesinatos a periodistas en el estado ha ido a la baja, las agresiones persisten y la estadística de 2021 es de 93 comunicadores, a los que su libertad de expresión se vio censurada e incluso hubo agresiones físicas en coberturas.
Cuestionado sobre zonas de mayor riesgo para los periodistas, el entrevistado manifestó que pese a que el corredor de Córdoba – Orizaba- Omealca- Tezonapa no tiene esa alerta, lugares como la zona de la Huasteca Alta en los límites con Tamaulipas y la región veracruzana que colinda con el estado de Oaxaca es donde más temor existe.
"Otra zona es la norte, Poza Rica, donde tenemos 3 o 4 casos de alto riesgo en los que hemos tenido que dar medidas de protección más duras con cuidados policiacos e incluso reubicación de colegas. Acayucan y Coatzacoalcos su dinámica es de cuestión situación social, pues diversos temas como líderes o alcaldes o representantes regionales tienen disputas por intereses y eso pone en riesgo a los periodistas”.
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Finalmente, Hernández Sosa recordó los dos últimos asesinatos en la región de la zona centro, siendo los de Julio Valdivia, asesinado en Tezonapa y Jacinto Romero, en Ixtaczoquitlán, donde con este último caso se han tenido avances en investigación e incluso hay detenidos como presuntos responsables del hecho, expresó.