Pese a la construcción de 46.5 kilómetros de vías para el tren Ligero, 57 kilómetros de carriles confinados al Macrobús y 100 kilómetros de ciclovías, el auto domina la Zona Metropolitana de Guadalajara.
Los viernes después de las 14:00 horas y los sábados entre 11:00 y 15:00 horas, avenidas como López Mateos y la salida a Manzanillo, Colima; Lázaro Cárdenas en su conexión con carretera al aeropuerto y Chapala, así como avenida Vallarta con conexión con carretera a Puerto Vallarta, colapsan. Esto causa que tramos que se recorren normalmente en 40 minutos, se lleven hasta tres horas de tiempo.
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Panorama de movilidad en la ZM
De acuerdo con cifras del 2021, en la entidad había dos millones 454 mil 890 automóviles particulares, un millón 69 mil 539 camiones y camionetas para carga, 649 mil 416 motocicletas y 12 mil 260 autobuses para pasajeros, lo que da un total de cuatro millones 185 mil 689 unidades, la mayoría concentrados en la Zona Metropolitana.
A estas cifras falta sumarle un número indeterminado de vehículos de visitantes permanentes, pero con placas de otros estados o en tránsito a otras ciudades, que se han convertido en un serio problema, según ha denunciado el propio gobierno de Jalisco.
En la Zona Metropolitana de Guadalajara, circulan el 64 por ciento del total de vehículos, con poco más de dos millones 582 mil 266, mientras que el municipio de Zapotlanejo tiene la mayor tasa, con 75.7 vehículos por cada 100 habitantes; le sigue Guadalajara con 72.3 y Zapopan con 54.4.
De 2019 a 2020, la clase de vehículo que mayor incremento registró fueron las motocicletas con un 9.6 por ciento, los camiones para pasajeros con un 7 por ciento, los automóviles con un 2.5 por ciento, y por último camiones y camionetas de carga con un 1.6 por ciento.
En el 2021 se aplicaron 182 mil 815 infracciones por estacionarse en zona prohibida; 72 mil 178 por estacionarse en zona prohibida en calle local; 33 mil 334 al detectar que no usaban cinturón de seguridad; 17 mil 880 por no portar tarjeta de circulación; y 16 mil 410 por circular con alguna puerta abierta.
Además 14 mil 55 por no respetar la luz roja del semáforo; 13 mil 893 por subir y bajar pasajeros en lugar no autorizado; 13 mil 631 por estacionarse sobre las banquetas, 11 mil 586 por conducir un vehículo sin el permiso específico y nueve mil 891 al circular sin casco de seguridad en una motocicleta.
Alternativas viales no han solucionado el problema
Luego de 20 años de no construir grandes obras para la movilidad en la ciudad -el primero de septiembre de 1989 se inauguró la Línea 2 del Tren Ligero-; en el 2009 se puso en funcionamiento Mi Macro que circula por la calzada Independencia por un tramo de 16 kilómetros; de 2013 a 2020 se construyó La línea 3 del Tren Ligero y en el gobierno actual se puso en funcionamiento Mi Macro Periférico, a lo largo de 41 kilómetros, aunque no incluyó a Tonalá.
A la fecha hay 57 kilómetros de carriles confinados al transporte articulado, de ellos 41 para el Macrobús del Periférico y 16 kilómetros en la Calzada Independencia. Pero también se suman más de 100 kilómetros de ciclopistas que se han construido en los últimos años, lo que genera la reducción de carriles en las principales vialidades, en menor cantidad hay ciclopistas integradas a las propias banquetas.
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Por la noche, es casi imposible utilizar esas ciclovías debido a la falta de seguridad y el transporte público, por sus constantes fallas técnicas, irregularidad en los horarios y debido a que a pesar del respaldo de las distintas rutas de camiones, resulta insuficiente, no ha alcanzado la confianza total de los usuarios.
