Monterrey, N. L.-El abuso policial en Nuevo León tiene un origen fundamental y es el estrés en los policías, revela el secretario de Seguridad Pública, Aldo Fasci Zuazua.
Ante ese fenómeno, hay incremento en las denuncias por abuso policial pero, agrega, los ciudadanos también están estresados en las calles.
"Hay mucho estrés en la calle, esta guerra contra el crimen organizado, esta legítima forma de protestar de la gente. Todo mundo se opone a una detención. Hay falta de respeto, falta de valores, la cantidad de drogas que hay en la calle, todo eso complica la situación".
"Todas las policías en este país están sufriendo muchas agresiones, y lo que tenemos que hacer es meternos al control de los impulsos, tenemos que bajarles el estrés”.
Para el funcionario todo se debe al estrés que hay en la calle y que incluye al ciudadano tanto como a los policías ya que, muchas de las personas que cometen alguna falta administrativa se resisten a un arresto o agreden a los elementos de seguridad, y éstos responden también en forma incorrecta.
"La sociedad también está estresada, hay que entenderlo, en la calle, literalmente a la hora de los golpes vienen estos impulsos que hay que detener en los 15 mil policías que hay en el Estado entre estatales y municipales", explica el secretario de Seguridad de Nuevo León.
Aldo Fasci revela que las pruebas de control de confianza no revelan posibles conductas agresivas de los policías, y aunque el Certificado Único Policial que ya se aplica en el Estado contiene otro tipo de evaluaciones, el avance es lento, reconoce.
Puntualiza que en una prueba que se aplicó a 8 mil 500 policías, éstos tienen un nivel de estrés muy alto y recomienda cambiar de función a algunos, a otros atenderlos y unos más ya no deben estar en la corporación.
Aceptó la existencia de excesos que son falta de protocolos y que, las detenciones ilegales son el 2 por ciento y agrega que se mantiene en pláticas con la Fiscalía pues no en todos los casos hay un delito y la sanción es de tipo administrativo.
Por otro lado, el reciente informe de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Nuevo León señala que la Secretaría de Seguridad Pública se ubica en el segundo lugar, tras de la Fiscalía que ocupa el primero, en lo que se refiere a la violación de las garantías y derechos de los ciudadanos.