La familia de la alpinista jalisciense Andrea Ivonne Hernández, solicita donativos para obtener tres millones de pesos y poder pagar los gastos médicos que se han generado a partir de su accidente.
Andrea era parte del grupo de senderistas que fueron arrastrados por el fuerte viento en la cima del Pico de Orizaba, en Puebla.
Actualmente ella se encuentra en un hospital privado en donde está recibiendo atención médica.
"Estable, pero sus manos están comprometidas. Su recuperación será muy larga, muy costosa y esperemos que en la cirugía de hoy, rescaten la mayor cantidad de su mano izquierda", señaló Juan José Aguilar, exesposo de Andrea.
En la cirugía de este martes, los médicos retirarían lo necrosado de sus manos, por las quemaduras con el hielo.
La familia de Andrea, ahora está consiguiendo recursos para poder solventar el costo de hospital, cuya cuenta es de 3 mdp.
"Nunca estamos preparados para una eventualidad de esta y menos con los costos tan altos que implica esto. Estamos hablando de una cantidad de 3 millones de pesos y estamos en la recaudación. La gente ha respondido bien, nos ha apoyado, pero creo que estamos como al 7 por ciento de lo que necesitamos".
Las personas que deseen solidarizarse con la causa de Andrea, pueden hacer depósitos bancarios al número de cuenta de BBVA, 010-382-2893 a nombre de Juan José Aguilar.
Su hermano, Óscar Efrén, compartió con @quierotvgdl, que Andrea perdió visión y el rumbo en el momento que sus compañeros comenzaron a descender debido a las fuertes rachas de viento, además de quedarse sin guantes para proteger sus manos por lo que estas resultaron con severas quemaduras.
“Ya se le aplicó una primera cirugía tratando de que tenga más irrigación sanguínea sus manos las trae muy lastimadas y con la segunda cirugía esperan solucionar el tema del tejido y sus tendones; sus manos están necrosadas y esperemos que las puedan salvar”.
Él asegura que Andrea desde hace seis meses practicaba senderismo. Ella junto con otros 11 amigos, salieron el 17 de febrero a la cima del Pico de Orizaba, pero las condiciones climáticas cambiaron drásticamente, por lo que el fuerte viento los arrastró.
Tras ello, dos de los alpinistas murieron, mientras que otros ochos lograron bajar y uno más sigue desaparecido.
Con información de Xiomara Flores / El Sol de Orizaba / Publicado en El Occidental