El hallazgo de una nueva fosa clandestina con 24 cuerpos, los cuales podrían incrementarse, a vuelto a causar que el personal del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses esté rebasado por el exceso de trabajo, lo que ha generado un atraso de varios días.
De acuerdo con personal de ese organismo consultado por este medio, se le está dando prioridad en la realización de las autopsias, a los cuerpos identificados, por esa misma condición y para evitar inconformidades de los familiares, pero están dejando de lado los no identificados por el hecho de que no hay quién pida cuenta de ellos.
La información recabada indica que el atraso es de dos días, es decir, un cuerpo que por el ejemplo ingresa un martes, es hasta el jueves que le toca su turno.
En el caso de los restos encontrados en la fosa clandestina de El Zapote, en Tlajomulco se realizan las necropsias en conjunto con los que ingresan a diario por diversos hechos.
Para dar agilidad a las necropsias, se creo una asociación la cual está integrada por peritos, quienes se encargan del armado de los cuerpos, para que posteriormente ser enviados al área en la que les realizan las autopsias.
Cabe destacar, que dicha agrupación, está encabezada por un perito pasante, que no cumple con el requisito de estar titulado para ocupar ese puesto.
La labor de los peritos parece interminable, ya que incluso aún no se termina de cuantificar cuántos cuerpos fueron los encontrados en la fosa de La Primavera encontrada el 3 de septiembre y ya se tiene otra en El Zapote, en la cual siguen las labores de búsqueda de más restos.