Este 20 de junio se cumple un año del día en que el país fue testigo de los disturbios que causaron temor en los celayenses y en todo aquel que transitaba por las carreteras aledañas a esta ciudad, y es que, por primera vez en la historia de Celaya hubo quema de vehículos y negocios por parte del cartel de Santa Rosa de Lima a causa de los cateos que realizaron las autoridades en los puntos relacionados con el grupo criminal y que derivó en la detención de 26 personas.
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Jessica Vega Zayas, especialista en el tema de seguridad, prevención de violencia y delincuencia, además de ser investigadora dentro de la división de Ciencias Sociales y Humanidades en la Universidad de Guanajuato (UG), campus León, mencionó que estos hechos violentos ocurrieron como consecuencia a que se dejó crecer la delincuencia, no hubo castigo, sino más bien impunidad.
Violencia, consecuencia de la impunidad
La especialista Jessica Vega, indicó que estos disturbios sucedieron a causa de que se dejó crecer a la delincuencia, no hubo castigo, si no impunidad, por ello los grupos delincuenciales encontraron un espacio para tomar la justicia por sus propias manos, rompieron el orden y buscaron someter a la ciudad para imponer sus condiciones escalando el nivel de violencia para mantener su propio orden.
“Cada vez es necesario el mayor uso de la violencia para poder controlar a los sujetos, porque a medida que la violencia rompe con el orden social, lo único que puede imponer es la violencia, la cual termina destruyéndose a sí misma, es por lo que los integrantes del crimen fueron más violentos”.
Revertir los daños
Vega Zayas, indicó que se tiene que actuar de manera paralela en varios ámbitos como el atender a las víctimas de delitos y a las personas que están a sus alrededores, que la presencia del estado se recupere de inmediato, que disminuya la impunidad.
Que la policía, junto con el poder judicial actúen para que haya una restitución del orden, del daño y contenerlo, llevar a cabo programas de prevención referente a los grupos vulnerables, entre otras cosas.
Celaya arde
Por la tarde-noche del sábado 20 de junio de 2020, por primera vez en Celaya una célula criminal había tomado las calles generando terror en la población al realizar bloqueos, quemar 21 vehículos y siete negocios.
Al principio la gente que se encontraba trabajando o realizando otras actividades en las calles quedaron desconcertadas por la fuerte movilización de patrullas de las diferentes corporaciones policiacas, así como de unidades de bomberos.
Al pasar los minutos y al darse cuenta de lo que estaba sucediendo los negocios cerraron, la gente decidió resguardarse en su casa e incluso el transporte público dejó de operar para evitar que fueran tomados e incendiados.
Primero se reportó el despojo violento de un taxi en la calle Presa Álvaro Obregón, el cual fue incendiado, al igual que otro vehículo en la calle Benito Juárez con Aztecas, también incendiaron camionetas, tráilerS, un camión de transporte público, un camión de pasajeros, entre otros automóviles en el libramiento sur, la salida a Villagrán, la salida a Salvatierra, la carretera Celaya-Juventino Rosas, donde se informó de la presencia de estrellas poncha llantas.
También hubo quema de vehículos en Santa María del Refugio, Michinelas, Rincón de Tamayo, la carretera a San Miguel Octopan, la Zona Centro, en las colonias Jardines de Celaya, Los Fresnos, La Trinidad, así como El Vergel.
A un año de la violencia, los negocios se recuperan
De igual forma se reportó el incendio de siete negocios que fueron: dos tiendas Oxxo, uno ubicado en la colonia Jardines de Celaya y otro en el acceso a Camargo, ambos se encuentran operando de manera normal.
Dos Bodega Aurrera, uno en la colonia San Antonio, el cual fue consumido en su totalidad, actualmente se encuentra rehabilitado y opera de manera normal, al igual que el ubicado en Francisco Juárez, el cual solo tuvo daño en el pasillo del papel sanitario.
Dos gasolineras una ubicada en la carretera a Juan Martín, la cual opera con normalidad, y otra en la calle José María Morelos, esta última se encuentra operando, pero sigue quemada en la parte superior, al preguntar a los trabajadores el motivo de que no se haya rehabilitado a un año del suceso, indicaron que lo desconocen.
También fue incendiada y consumida en su totalidad la mueblería Florence Art ubicada en el Boulevard Adolfo López Mateos, la cual fue limpiada, pintada, se han colocado algunos vidrios, cables eléctricos, además de que solicitan personal de ventas.
Testimonios
"Celaya ya no es igual, se siguen dando asesinatos en lugares concurridos, bares, barberías, y hasta en la vía pública. Los delincuentes llegan y disparan contra sus rivales, sin importar que dejen víctimas colaterales. Por eso yo ya no frecuento los bares". Dijo el joven Manuel
"Fue una época que se sentía mucho temor de andar en la calle, pensarle poner un negocio por todo lo que estaba pasando y que se veían casos cada vez más cercanos. Ahora sigue habiendo miedo pero no tanto como en ese tiempo. (Con la captura de El Marro) yo pienso que sí disminuyó un poco la delincuencia y el enfrentamiento entre carteles. Antes era a diario escuchar ejecuciones, secuestros, levantones y aunque todavía sucede siento que es menos", comentó la señora María.
"La violencia está en aumento otra vez, había tenido una disminución, pero en los meses recientes hay una nueva ola de violencia en la que no hay día que no suene al menos de una persona asesinada", comentó el señor Eduardo.
"Yo creo que la gente sigue viviendo con miedo. Hay un toque de queda voluntario, ya los negocios cierran temprano y es poca la gente que anda en la calle hasta tarde. Aunque ha habido semanas en que no se oye de tantos muertos, hay otras en que sí. La violencia sigue". Mariana
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Cabe mencionar que en Celaya la gente prefiere no emitir su opinión respecto a temas de seguridad, debido a la inseguridad que aun impera en el municipio.