Tras las acusaciones de que autoridades estatales tienen nexos con los grupos criminales en Chiapas, el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) aseguró que el estado esta al borde de una guerra civil.
Por medio de un comunicado publicado el pasado domingo, en donde se emitió a raíz del secuestro del que fueron victimas dos de sus integrantes el pasado 11 de septiembre, quien después de ochos día y con ayuda de párrocos de San Cristóbal de Las Casas y de Oxchuc, pudieron ser liberados.
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El Subcomandante Insurgente Galeano, quién firma la misiva, detalló que mientras se encontraban en la delegación zapatista aérea en la Ciudad de México, miembros de la ORCAO, organización paramilitar que aseguran, está al servicio del gobierno del estado de Chiapas, secuestraron por ocho días a sus compañeros Sebastián N y José Antonio N, autoridades autónomas de la Junta de Buen Gobierno de Patria Nueva, Chiapas.
Asimismo, indica que “mientras el gobierno del estado de Chiapas saboteaba y estorbaba la liberación, fueron organizaciones defensoras de los derechos humanos y la iglesia católica progresista quienes valoraron con justeza lo que podría ocurrir”, a pesar de que el delito es penado por las leyes “del mal gobierno”.
Aseguró que el gobierno del estado mantiene alianzas con el narcotráfico, las cuales “provocan que las comunidades originarias se vean obligadas a formar grupos de autodefensa, porque el gobierno nada hace para preservar la vida, libertad y bienes de los pobladores” y, así vez se generen conflictos como las comunidades de Aldama y Santa Martha.
Agrego que existen diversas problemáticas dentro de la política gubernamental del estado, por lo que “las inconformidades entre la población rural no tardarán mucho en explotar.”
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Por último, hizo un llamado para realizar movilizaciones este 24 de septiembre; no solo en Chiapas, sino a nivel nacional e internacional por estos hechos, y advirtió que el EZLN tomará otras medidas de manifestación que ya no serán a través de comunicados.
“Llamamos a la Europa de abajo y a la izquierda y a la sexta nacional e internacional a manifestarse frente a las embajadas y consulados de México, y en las Casas del Gobierno del Estado de Chiapas, para exigirles que se dejen ya de provocaciones. Es todo. Para otra ocasión ya no habrá comunicado, sino hechos”.
