Culiacán, Sin.- Debido a que los hipopótamos del zoológico del extinto narcotraficante Pablo Escobar en Colombia podrían ser sacrificados, El santuario de Ostok y la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (Azcarm) colaboran con las autoridades del gobierno de Colombia para reubicar a estos animales, de los cuales 10 podrían terminar en Culiacán.
Por su ritmo de reproducción, los hipopótamos fueron declarados una especie invasora, lo que representa una amenaza ambiental para el país de América del Sur.
“Al estar en status de especie invasora todos estos animales están sujetos a un exterminio, entonces nosotros como AZACARM venimos a apoyar y a buscar la forma y el lugar para trasladarlos a otros países por medio de nuestra gestión como Asociación de Zoológicos. Por ejemplo, ya estamos en pláticas con un centro de rescate en la India que podría recibir un grupo grande de aproximadamente 60 hipopótamos y estamos tratando de llevar al Santuario Ostok 10 ejemplares”, informó en un comunicado la Azcarm.
Asimismo, explicó que están trabajando de la mano con el Ministerio de Desarrollo Sostenible de Colombia para que los 133 hipopótamos, descendientes de tres hembras y un macho que eran propiedad de Pablo Escobar, no sean san sacrificados.
Ernesto Zazueta, presidente de la Azcarm, explicó que desde que el narcotraficante fue acribillado en la década de los 90, los animales quedaron sin vigilancia y hoy viven en las márgenes del río Magdalena, donde se reproducen a tasas tan elevadas que en solo 10 años son 400 ejemplares los que habitan la zona.
“Estos enormes animales que son del continente africano, aquí en Colombia tienen una dinámica de crecimiento mucho más acelerada porque no existen sus depredadores naturales ni algunos aspectos ambientales, como largos periodos de sequía, que pueden destruir sus hábitats y evitar su reproducción. Es por ello que se han reproducido exponencialmente convirtiéndose en un serio problema ambiental para el ecosistema colombiano en el que habitan”, explicó Zazueta.
Son una amenaza
Asimismo, detalló que representan un peligro ecológico para la región porque son animales que pueden pesar hasta 3 toneladas y necesitan 200 kilogramos de alimento diariamente, por lo que arrasan con la flora y la fauna del humedal donde viven.
Por otro lado, debido a su tamaño y cantidad, estos hipopótamos representan un peligro para gente que realiza actividades en esa zona, como campesinos, turistas e incluso deportistas.
Debido a que ya fueron declarados una especie invasora, las autoridades colombianas esterilizar o castrar a estos ejemplares, así como enviarlos a otros zoológicos o santuarios, pero también podrían ser sacrificados.
Nota publicada en El Sol de Sinaloa