Aunque aparentemente la zona sur del Estado de México luce tranquila, habitantes refieren que se respira incertidumbre luego de los hechos ocurridos la tarde noche del martes y tras las mantas del jueves por la madrugada, que obligaron a las autoridades de varios municipios sureños a suspender clases.
“Acá aparentemente está tranquilo, pero todos estamos en la incertidumbre por lo que pasó el martes pasado y las advertencias que aparecieron en las narco mantas", dijo un vecino de Tejupilco.
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Explicaron que a raíz de los hechos violentos en Sultepec que se extendieron a otros municipios de la zona, las clases fueron suspendidas en los planteles educativos e incluso otro tipo de actividades.
“Desde el miércoles se suspendieron las clases y todavía estamos esperando que nos avisen si ya se reanudan mañana lunes”, declaró un profesor de esta zona.
Detallaron que a raíz de los hechos del martes, la presencia policíaca ha sido nula, de tal suerte que la gente a partir de las 20:00 horas mejor se guarda en sus casas.
“Hay poca presencia policíaca y lo que hacemos es mejor meternos a casa temprano y ya después de las 8 no salimos”, añadió el habitante del municipio de Tejupilco.
Varios habitantes coincidieron en que se respira un ambiente de incertidumbre y por lo mismo, toman algunas precauciones para evitar alguna situación de violencia que pudiera darse entre el crimen organizado y autoridades policiacas.
“No sabemos que pueda pasar y por eso mejor no salimos ya muy tarde, pues en cualquier momento pudiera presentarse algún enfrentamiento”, aseveró el habitante del lugar.
La situación no cambia en otros municipios sureños incluyendo el mismo Sultepec, donde también los habitantes se encuentran en la incertidumbre e incluso han pedido a familiares que viven en otros lugares, mejor no visitarlos.
La alerta también ha sido tomada en cuenta por algunos sectores religiosos, tales como un pastor de la iglesia Cristiana El Nazareno, quien decidió que a partir de este fin de semana dejaría de asistir al municipio de Sultepec a predicar.
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Y es que, comentó, los mismos habitantes le sugirieron que mejor se quedaran en la ciudad de Toluca ya que el ambiente se encuentra tenso.
De hecho, le indicaron que después de la balacera del pasado martes en Sultepec, en el techo de la iglesia cristiana se encontraron varios casquillos percutidos.
Publicado originalmente en El Sol de Toluca