TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis.- Integrantes de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) tomaron unas 10 gasolineras en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, y regalaron cientos de litros de combustible a los automovilistas que llegaron durante la mañana; sin embargo, los policías estatales resguardaron algunos sitios a petición de empresarios.
Los docentes se apostaron desde temprana hora en varios puntos e invitaron a los automovilistas a acercarse para proporcionarles de manera gratuita unos 15 litros de combustible; no obstante, muchos ciudadanos se negaron aceptar y exhortaron mediante redes sociales a no participar en este acto.
La CNTE se apoderó durante cuatro horas de la gasolinera del Libramiento Norte y Calzada al Sumidero, Juan Crispín, Diana Cazadora, Libramiento Sur, salida a Chiapa de Corzo, bulevar Ángel A. Corzo y carretera a Villaflores, entre otras, para presionar a las autoridades a negociar la eliminación de la Reforma Educativa.
Un día antes, dio a conocer mediante un comunicado que convocaba a la clase trabajadora, al pueblo y las organizaciones a sumarse a esta lucha por el respeto a los derechos y dignidad.
La Coordinadora mantiene desde el 4 de junio un paro laboral en espera de que el gobierno federal instale una mesa de negociación, a fin de resolver sus demandas.
Por su parte, el gobierno de Chiapas reconoció la capacidad de diálogo de los maestros y anunció que la CNTE aceptó iniciar una mesa de trabajo, en la cual estarán representantes del gobierno federal y que se efectuaría en Tuxtla Gutiérrez.
Sin embargo, ayer los maestros llevaron a cabo acciones radicales como la toma de gasolineras, y continúan con el plantón que mantienen en el Parque Central de la capital.
El pasado 4 de junio la CNTE en Chiapas inició el paro indefinido de labores en la entidad con una marcha y la instalación de su campamento en la plaza central.
En esa ocasión el secretario de Educación, Eduardo Campos, anunció que en Chiapas no hay razón para suspender clases y afectar el proceso formativo de más de un millón de estudiantes, porque el gobierno del Estado atiende permanentemente las demandas magisteriales.