Zacatecas.- De cada mil dólares que invierte la empresa canadiense Goldcorp en la mina Peñasquito, ubicada en Mazapil, devuelve a la población únicamente 18 centavos de dólar, además de que ha dejado en desabasto de agua y ha contaminado el ambiente en aproximadamente ocho ejidos, denunció Pedro Moctezuma, miembro de la Coordinadora Agua Para Todos, Agua para la Vida.
Dentro del marco del IV Congreso de este movimiento, Mazapil fue sede de reunión de activistas provenientes de diferentes partes del estado de Zacatecas y de la República Mexicana, pues son víctimas de las "llagas de la minería tóxica, la escasez de agua y la falta de equidad en distribución del vital líquido".
De acuerdo a Moctezuma, también coordinador general del programa para la sustentabilidad de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Zacatecas tiene un déficit de 300 millones de metros cúbicos de agua, y sin embargo, empresas extranjeras explotan decenas de millones de metros cúbicos que a su parecer, empeoran la situación ambiental.
De manera puntual, los activistas que se congregaron en este congreso, un aproximado de 80 de ellos, expusieron cómo empresas cerveceras, saladoras, termoeléctricas, mineras, inmobiliarias, entre otras, han dejado estragos en el medio ambiente, en la distribución del agua y en materia de empleo.
En el caso de la mina Peñasquito, la cual tiene nueve años de funcionamiento, se señaló que su actividad en ese territorio minero, ha generado afectaciones en ejidos y comunidades como El Vergel, Cedros, Matamoros, Charcos, San Antonio, Cerro Gordo, Salaverna, Mesas del Portezuelo, Tecolotes, El Rodeo y otras.
El principal problema que señalan los habitantes de estas localidades es que cada vez hay menos agua y en peores condiciones, lo que no sólo los afectados directamente, sino a sus cultivos, ganados e incluso el medio ambiente.
A manera de ejemplo, los manifestantes apuntaban que por cada tonelada de mineral que se sustraía, se ocupaban tres toneladas de agua, esto en Mazapil, mientras que las empresas cerveceras, por cada botella que elaboran, es decir 355 miligramos, necesitan siete litros de agua.
Además, denuncian que no han percibido mejoras económicas en el entorno ni en sus hogares, ya que además solo el cinco por ciento de los vecinos han sido empleados, mientras que el otro 95 por ciento proviene de fuera del estado e incluso del país.
En este sentido, Pedro Moctezuma, miembro de la Coordinadora en comento, que organizó la cuarta edición de este congreso, refirió que esto representa una nueva colonización, en donde empresas extranjeras, provenientes de Estados Unidos, España, China, Reino Unido y Canadá, vienen a saquear terrenos zacatecanos sin devolverles nada al territorio que explotan.
Puntualmente, señaló que de mil dólares que se invierten en Peñasquito, se le devuelve a la población solamente 18 centavos de dólar.
Es por esto que en su oposición luchan por qué se retiren las empresas mineras de sus territorios, como es el caso particular de Zacatecas, que se legisle la Ley General del Agua, en donde se recalque que el oro azul (el agua) es derecho de cualquier ser humano, y que además acabe con el ecocidio que general las empresas tóxicas.
Asimismo, se pretende que mediante el diálogo y debate con los congresistas, se cree un plan de acción sólido en alfabetización hídrica, es decir, amparos en contra de decretos a concesiones; no al fracking y la anulación de los lineamientos que lo permitan; gestión de proyectos pilotos para ahorro y reutilización de agua; ente otros.
Así pues, algunos participantes de este congreso provenían de los estados de Toluca, Baja California Norte, Nayarit, Guerrero, Chiapas, Estado de México, Ciudad de México, San Luis Potosí, Durango, Sonora y Zacatecas, quiénes estarían realizando más actividades durante hoy sábado y mañana domingo, en la ciudad capitalina zacatecana.