Luis del Río y Santiago, único sacerdote autorizado para hacer exorcismos en Coahuila, falleció a los 86 años.
Este domingo murió el cura y exorcista José Luis del Río y Santiago, en el Hospital La Concepción, de Saltillo, donde se sometería a una cirugía por pancreatitis aguda.
Sin embargo, diversas complicaciones cardiacas impidieron que la operación se concretara satisfactoriamente.
Tras el deceso, el cuerpo del padre fue llevado a la parroquia del Ojo de Agua, donde fue párroco durante 32 años (hasta que fue removido en 2008), para que fuera velado por los fieles.
Del Río y Santiago, que vivía en el retiro, cobró notoriedad por ser el único sacerdote de la Diócesis de Saltillo autorizado por la Santa Sede para realizar exorcismos, tarea que desarrolló por más de 20 años en distintos municipios del estado.
Fue ordenado como sacerdote el 17 de mayo de 1970, pero el 15 de marzo de 2011 se convirtió en noticia al permitir que un canal de televisión local transmitiera en vivo el exorcismo de un adolescente que presuntamente era víctima de la posesión de cuatro demonios, el que se prolongó por varias horas.
El menor estaba presuntamente poseído por cuatro entidades diferentes y durante la transmisión se aprecia como cada uno se manifiesta a través del joven.
Antes de que terminara la ceremonia, el adolescente se desvaneció y luego de recuperarse, se disculpó con el religioso por las agresiones de las que había sido víctima e intentó besarle la mano.