Nuevo León.- Las altas temperaturas y la falta de agua obligan a los animales a bajar de la Sierra Madre Oriental como un oso que entró a una residencia de la Colonia Valle de San Ángel, sector Español, en San Pedro Garza García.
De acuerdo a Protección Civil de San Pedro, el avistamiento fue reportado en una casa ubicada en la calle Escorial, número 119 donde el oso salió del domicilio y aparentemente se asustó por los ladridos de perros y subió a una arbolada, donde permaneció un buen tiempo.
Hace unos días, un pequeño oso bajó de la sierra a la zona urbana al poniente de la zona metropolitana regiomontana.
El animal fue capturado tras ser encontrado vagando por las calles de la colonia Montenegro, según el reporte del avistamiento.
Sin embargo, en las maniobras para capturarlo se llevaron unas ocho horas.
El osezno estuvo en el domicilio con el número 311 de la calle Monte Popocatépetl y Prolongación Constitución, en donde elementos de Parques y Vida Silvestre le dispararon cuatro sedantes.
"Es un cachorro que bajó de la sierra alta de la huasteca y se activó de inmediatamente el protocolo que prácticamente es tratar de regresarlo a su hábitat, pero esto no fue posible", explicó Gilberto Almaguer, director de grupo Jaguares, de Protección Civil de Santa Catarina.
Horas después de ser capturado, el osezno fue puesto en libertad en la zona conocida como La Huasteca.
En los últimos cinco años, por lo menos un centenar de osos han bajado de la Sierra Madre en diversos puntos metropolitanos del poniente y sur los que llegan a zonas habitadas en busca de agua y alimentos.
En la mayoría de los casos, los osos no son capturados y huyen, y en otras son regresados a su hábitat natural.
La falta de lluvia y las altas temperaturas que contribuyen a escasear la comida, obligan a esos animales a caminar kilómetros para llegar a zona habitacionales en busca de alimentos y líquidos, por lo que se solicita a las personas tener cuidado, no darles de comer y exponerse a un ataque.