La acumulación de cadáveres sin identificar almacenados en los sistemas de refrigeración del Servicio Médico Forense (Semefo), en los principales municipios del estado de Guerrero, rebasa la capacidad.
De acuerdo con información de fuentes del Servicio Médico Forense, la acumulación es por el aumento de la violencia en el estado, así como del trabajo de Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado, quienes se retrasan en los exámenes de genética forense, de antropología y dactiloscopia.
Se informó que en el estado se tienen casi 800 cadáveres a espera de ser identificados y reclamados, sin embargo, en las cámaras frigoríficas sólo hay capacidad para unos 270 cuerpos en los tres principales municipios, lo que contrasta con los 750 cadáveres existentes.
Se reveló que en el Semefo de Acapulco hay cinco cámaras frigoríficas con una capacidad para 150 cuerpos, en Chilpancingo tres cámaras para 90 cuerpos, y en Iguala tiene una sola cámara para 30 cuerpos.
Asimismo, se indicó que hay cuerpos almacenados desde 2011 en las cámaras frigoríficas, y al menos el 80 por ciento fueron víctimas de violencia.
El pasado 22 de abril, 31 cadáveres que no fueron reclamados en el Semefo por sus familiares en Acapulco, fueron enviados al Panteón Estatal Forense, ubicado en Chilpancingo para su identificación y conservación.
Se indicó que los cadáveres permanecieron en el Semefo desde 2016 y 2017 provenientes de Acapulco, Coyuca de Benítez y San Marcos que abarca la Fiscalía regional, así como algunos de Costa Grande y Costa Chica.
El 22 de marzo, la Fiscalía General del estado y la Secretaría de Salud estatal informaron en un comunicado que se habían contabilizado 60 cuerpos inhumados en Acapulco, además de 67 de la región Centro y 52 de la Zona Norte que, sumaban ya 179.