La ola de violencia de los últimos días en Culiacán ha dejado pérdidas por dos mil millones de pesos, de acuerdo con locatarios y restauranteros de la capital de Sinaloa.
En tanto, Coppel limitó la apertura de sus tiendas, mientras que FEMSA tomó medidas preventivas en sus sucursales Oxxo.
El presidente de la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán, Óscar Sánchez Beltrán. informó que el cierre de negocios en varias zonas de la capital de Sinaloa dejó pérdidas por mil 200 millones de pesos y que a pesar de que algunos de los negocios ya abrieron, muchos siguen sin operar con normalidad debido a la renuncia de alrededor de dos mil trabajadores desde el pasado lunes por la inseguridad.
El representante de los locatarios de Culiacán destacó que las pérdidas económicas por los hechos de violencia también son la cancelación de los festejos patrios.
Además, indicó que muchos dueños de negocios han manifestado que no esperan que la delincuencia disminuya o sea controlada, por lo que calculó que sólo 70 por ciento abra sus puertas.
Laura González Torróntegui, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Culiacán, dijo que entre lunes y jueves el sector registró pérdidas de 800 millones de pesos, que sumadas los mil 200 de los locatarios son los dos mil millones de pesos.
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“Ya habrá tiempo para que la ciudadanía disfrute de ese tipo de eventos tan grandes que se estaban organizando”, comentó la presidenta de la Canirac local.
González Torróntegui dijo que ante los hechos de inseguridad es mejor resguardarse en lugares cerrados, por lo que contarán con las medidas necesarias en caso de algún incidente.
Por otra parte, Francisco Manuel Palomera, presidente de los locatarios del Mercado Gustavo Garmendia, explicó que a pesar de los hechos de alto impacto, 60 por ciento de los establecimientos se mantuvieron abiertos, sin embargo, las ventas de algunos comerciantes se desplomaron hasta 90 por ciento.
Empresas tomaron medidas para garantizar la seguridad de trabajadores y clientes. En el caso de Coppel, anunciaron que sus tiendas permanecerán abiertas en horarios limitados y su personal dispondrá de transporte seguro.
“Hemos tomado medidas como facilitar transporte a nuestro equipo para trasladarse a sus centros de trabajo y hemos limitado aperturas de tiendas y rutas de distribución de mercancía en zonas donde las autoridades han compartido recomendaciones puntuales”, comunicó la cadena Coppel.
Estas medidas, agregó la compañía Coppel, se suman a las acciones de otras empresas en la zona ante el clima de inseguridad que se vivió en los últimos días en Sinaloa.
“Hemos mantenido la operación con las limitaciones que ha permitido el contexto, fortaleciendo las medidas de seguridad para nuestros colaboradores y clientes, siempre en comunicación estrecha con las autoridades”.
Coppel anunció que estará atenta a las medidas de seguridad que las autoridades implementen para actualizar el estatus de sus operaciones en la entidad, según sea el caso.
El pasado jueves, Fomento Económico Mexicano (FEMSA), informó sobre la aplicación de “medidas preventivas” en sucursales de Oxxo en distintas zonas de Sinaloa para resguardar el bienestar de sus colaboradores y clientes.
Otro de los sectores que también se vio afectado por la ola de violencia y cancelación de eventos patrios fue el hotelero de la ciudad al registrar cancelaciones de reservaciones.
El presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Culiacán, José Manuel de las Rivas, informó que con la suspensión del Grito de Independencia se cancelaron 50 por ciento de las reservaciones en alojamientos.
“Me atrevo a decirte que la mitad de la gente que iba a venir no vino. El que vino fue porque tenía que venir, era inamovible; el que podía postergar, lo postergó, y el que pudo cancelar lo canceló”, indicó el representante de los hoteleros.
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Organismos como la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur) y la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), hicieron un llamado para restaurar la paz en el estado.
La Coparmex destacó que la inseguridad en Sinaloa ha llevado al cierre de escuelas y ha forzado a muchos negocios a suspender actividades para garantizar la integridad de trabajadores y clientes.